Durante su gira oficial por Arabia Saudita, Catar y Emiratos Árabes Unidos, el presidente Gustavo Petro avanzó en la consolidación de una agenda diplomática enfocada en atraer inversiones y fortalecer la cooperación con las monarquías petroleras del Golfo. El mandatario inauguró la Embajada de Colombia en Riad y sostuvo encuentros con el príncipe heredero Mohamed bin Salman y otros líderes regionales.

Según información publicada por Cambio Colombia, estos países se han convertido en socios estratégicos para el Gobierno colombiano, no solo por su capacidad económica, sino también por su creciente interés en apoyar proyectos sostenibles. Las monarquías del Golfo compran a Colombia más de 609 millones de dólares al año e impulsan programas de cooperación en salud, educación y desarrollo empresarial.

Petro busca posicionar a Colombia como un destino atractivo para los fondos soberanos de inversión de la región, con énfasis en proyectos de hidrógeno verde, energías limpias y movilidad sostenible. Durante la visita, el mandatario destacó que la transición energética es una prioridad nacional y que el país necesita aliados que compartan su visión ambiental.

El Gobierno considera que esta nueva relación con el Medio Oriente abre un capítulo diplomático que trasciende el comercio petrolero, apuntando a fortalecer la presencia internacional de Colombia y a diversificar su política exterior hacia escenarios globales emergentes.