Las autoridades investigan la trágica muerte de Liliana Cruz Buitrago, una joven trabajadora social de 25 años, quien falleció tras recibir un disparo del fusil de dotación de su esposo, el subteniente Haminton Ruiz Bolívar, comandante de la Estación de Policía de Chiscas, Boyacá.

Los hechos ocurrieron en la noche del miércoles 19 de noviembre. Según las primeras versiones conocidas por los medios nacionales, el oficial manipulaba su fusil Galil cuando el arma se habría accionado de manera accidental, impactando a la joven y causándole la muerte. La hipótesis preliminar apunta a un error en el manejo del arma de dotación.

Uno de los puntos que actualmente revisan los investigadores es el lugar exacto donde ocurrió el disparo. Inicialmente se afirmó que había sucedido en un establecimiento de comidas rápidas; sin embargo, la defensa del subteniente sostiene que el disparo se produjo dentro de la vivienda donde residía la pareja, a pocas cuadras de la estación de Policía.

La Fiscalía General de la Nación y la Justicia Penal Militar adelantan las acciones correspondientes para esclarecer si se trató de un caso de homicidio culposo o un accidente derivado de fallas en los protocolos de manipulación del arma. Por ahora, todas las versiones oficiales coinciden en que no existe evidencia de una agresión intencional, aunque el proceso continúa en curso para establecer las circunstancias completas del hecho.