Un incendio de gran magnitud arrasó este 26 de noviembre un complejo residencial en Wang Fuk Court, en el distrito Tai Po, al norte de Hong Kong, dejando un saldo preliminar de al menos cuatro personas muertas —incluyendo un bombero— y ocho heridas. 

El fuego se propagó rápidamente por los andamiajes de bambú que cubrían el edificio en remodelación, lo que ayudó a que las llamas se expandieran con gran celeridad. Las autoridades elevaron la alerta a nivel 4 —de 5— para coordinar los esfuerzos de rescate y control. 

Bomberos acudieron con escaleras y motobombas, intentando rescatar a residentes atrapados entre el humo y las llamas. Vista la magnitud del siniestro, varios vecinos fueron evacuados y se cerraron rutas de transporte para facilitar el operativo. 

El complejo afectado alberga cerca de 2.000 apartamentos, lo que eleva la preocupación por la cantidad de personas que podrían estar impactadas por el desastre. Las autoridades iniciaron una investigación para determinar las causas del incendio, mientras se asegura atención médica a los heridos. 

Este hecho revive los debates sobre los andamiajes de bambú usados en renovaciones en Hong Kong, señalados anteriormente por su riesgo de incendio, especialmente en zonas densamente pobladas como Tai Po.